EXISTENZ (1999) |
EXISTENZ (David Cronenberg)
SINOPSIS: En los albores del siglo XXI, los videojuegos han pasado a convertirse en una atracción imprescindible para gran parte de los adolescentes y jóvenes de todo el mundo. En Canadá tiene lugar un simposium sobre creadores de videojuegos, que despiertan el entusiasmo e incluso la veneración entre los usuarios de las consolas. En un nuevo paso hacia la interactividad total, se están desarrollando una serie de juegos que pueden recrearse a través del propio cuerpo humano. Allegra Geller es una joven programadora informática que después de desarrollar un videojuego llamado “eXistenZ”, se ve amenazada por un grupo de fanáticos. En su intento por esconderse del peligro que la acecha, Allegra encuentra la única ayuda posible en Ted Pikul, un guardia de seguridad con quien compartirá experiencias virtuales.
COMENTARIO: Surgida de una de las voces más autorizadas del cine fantástico en el pasado siglo, David Cronenberg, la cinta ExistenZ resulta una de las más virtuosas y alambicadas de su realizador. En ella describe una sociedad futura, sin llegar a ser ubicada del todo; minimalista y aséptica, donde los grupos actúan de manera distinta según su concepción personal de la vida. Una sociedad dividida entre virtual y realista, en la cual esta última supone una minoría acaso decreciente. Compuesta de elementos propios del cine de ciencia-ficción, sin llegar a utilizar artilugios excesivamente diferenciadores (apenas un teléfono móvil fluorescente) e innovadores, ExistenZ da su nombre a un vídeo-juego de realidad aumentada, totalmente orgánico. He aquí un trazo distinto al de otras cintas de nivel argumental análogo (Matrix, del mismo año de producción; Virtuosity o Hideaway, ambas del olvidado Brett Leonard), sin la magnificencia de estas ni la espiral de efectos especiales de la primera. En este sentido, los simples pero eficaces efectos visuales de la cinta se perciben bajo una simplicidad atribuible a la persona de Jim Isaac, auténtico innovador como Cronenberg en el diseño de esos aparentemente inofensivos juguetes (una pistola realizada con huesos animales que dispara dientes en lugar de balas; un anfibio de dos cabezas que remite al mejor Ray Harryhausen,...). Hay que tener en cuenta que ExistenZ representó la primera película de Cronenberg en emplear efectos digitales, algo ya bastante usual en los años noventa. En cierta forma, David Cronenberg (Presidente ese mismo año de producción, 1999, del jurado del Festival de Cannes) quiso amoldarse a los tiempos sin tener que renunciar a sus principios de artesano al servicio de sus inquietantes pensamientos. Una larga conversación con Shalman Rushdie, el afamado escritor no por voluntad propia sino por cargar contras el mundo del fanatismo musulmán en Versos satánicos, sería la fuente de inspiración de un Cronenberg que empezaba a mover los hilos en 1995 de una de sus obras más veneradas y complejas: Crash.
Como decíamos, el cine de Cronenberg es orgánico y se fusiona entre él, a través de ideas (la denominada “Nueva Carne”), conceptos y prolongaciones de sus historias. De alguna forma, se interconecta como los personajes de Pikul (un sobrio Jude Law, preludiando su rol en A.I., Inteligencia artificial) y Allegra Geller (una desoncertante Jennifer Jason Leigh, fruto de la masculinidad que marca su personaje), ambos pareja de aventureros en un espacio fantasioso a la vez que peligroso.
Las fuerzas gubernamentales en ExistenZ son substituidas por una corporación (otras más en el cine de Cronenberg) que deambula por una cuerda demasiado floja entre la realidad y la ficción. Incluso para los protagonistas absolutos de la cinta, la metáfora del entrar a formar parte del mundo real o del virtual resulta una asunción de su propia debilidad como individuo. Es aquí donde Cronenberg se convierte en un prestidigitador de este mundo ambivalente, sin excesivo ruido ni artificios; deambulando por niveles solo conferidos al ser humano más codicioso. Así, Cronenberg describe con breves pinceladas y elementos fácilmente asumibles en un futuro demasiado cercano, en escenarios cerrados y reconocibles (obra de Caroline Spier, directora artística adscrita desde hacía años a su cine), una efervescencia de un enfrentamiento que tiene más que ver son la mente que con lo físico. Un nivel de comprensión que merece más de un visionado, en la cual las capas de superación se convierten en un juego de doble filo, arriesgado y letal, en ocasiones.
El mayor elogio que, a mi entender, se puede decir de ExistenZ es que encaja a la perfección en esa evolución que sufrió el cine de Cronenberg a través de los años hasta convertirse en algo quizá inteligible en su cenit. Las vainas orgánicas y génicas que substituyen a los Joysticks caseros son un elemento crucial de versatilidad de un realizador en constante reinvención de sus filias y fobias. Convertir dicho artilugio en algo sexual tiene un componente enfermizo a la vez que metafórico y premonitorio. Cronenberg sienta las bases de lo que veinte años después empieza a considerarse una enfermedad (curable) de la psique humana, especialmente entre adolescentes. Sin embargo, Cronenberg carga más contra la manipulación de los medios que contra los peligros que entraña una adicción en boga entre segmentos crecientes de la población. No alerta sino que subraya la cada vez más deteriorada sociedad en la que vivíamos o vivimos hoy en día.
Un título a redescubrir.•
Àlex Aguilera
. Trailer original de su estreno en cines comerciales y e arte y ensayo. 2’ 10’’.; MAKING OF FX. El equipo de efectos digitales en pleno trabajo de confección de los pequeño monstruos que aparecen en la película. 3’ 15’’. ESCENAS DEL RODAJE. La cámara siguiendo los pasos por el rodaje en tierras canadienses de un film aparentemente de mediano presupuesto. 4’ 13’’. ENTREVISTA A DAVID CRONENBERG. Diferentes cortes de una interesante entrevista promocional del realizador de Toronto. 4’ 30’’.
BONUS/ EXTRAS: TRAILER DE CINE |